🔒 EXCLUSIVE: Es/parents/vsd.html - Full Gallery 2025
Comunicación interventricular
¿Qué es una comunicación interventricular?
Una comunicación interventricular (CIV), a veces conocida como un agujero en el corazón, es un tipo de anomalía cardíaca congénita. En una comunicación interventricular, hay una abertura anómala en la pared que divide las dos cavidades cardíacas principales, encargadas de bombear sangre (los ventrículos).
La comunicación interventricular es la anomalía cardíaca congénita más frecuente. La mayoría de los casos de comunicación interventricular se diagnostican y se tratan con éxito y con pocas complicaciones o ninguna en absoluto.
-

Resumen de 30 segundos: Comunicación interventricular
Aprende lo básico en 30 segundos.
¿Qué ocurre en una comunicación interventricular?
El ventrículo izquierdo y el ventrículo derecho del corazón están separados por una pared compartida, llamada tabique. Los niños con una comunicación interventricular tienen un pequeño orificio en ese tabique. Por lo tanto:
- Cuando late su corazón, parte de la sangre del ventrículo izquierdo (que ha sido enriquecida con el oxígeno procedente de los pulmones) fluye hacia el ventrículo derecho a través del orificio del tabique.
- En el ventrículo derecho, esta sangre rica en oxígeno se mezcla con sangre pobre en oxígeno y regresa a los pulmones.
La sangre que fluye a través del orificio genera un ruido adicional, conocido como soplo cardíaco. Los médicos pueden escuchar el soplo cardíaco cuando auscultan al paciente con un estetoscopio.
Las comunicaciones interventriculares pueden ocurrir en diferentes lugares del tabique y pueden tener distintos tamaños.
¿Cuál es la causa de una comunicación interventricular?
Las comunicaciones interventriculares ocurren a medida que el bebé se desarrolla en el vientre materno. El corazón se desarrolla a partir de un tubo grande, que se divide en partes que acabarán convirtiéndose en tabiques y cavidades. Si ocurre algún problema durante este proceso, se puede formar un orificio en el tabique interventricular.
En algunos casos, la tendencia a desarrollar una comunicación interventricular se puede deber a que el bebé padece un síndrome genético asociado a un exceso o una falta de material cromosómico. De todos modos, la gran mayoría de las comunicaciones interventriculares no tienen una causa clara.
¿Cuáles son los signos y los síntomas de una comunicación interventricular?
Si una comunicación interventricular provoca o no síntomas depende del tamaño del orificio y de su ubicación. Las comunicaciones interventriculares de tamaño reducido no suelen provocar síntomas y tal vez se cierren por sí solas.
Los niños mayores o los adolescentes con comunicación interventricular de tamaño reducido que no se cierran no suelen presentar síntomas, aparte del soplo cardíaco. Es posible que deban ir al médico con regularidad para asegurarse de que la comunicación interventricular no esté provocando ningún problema.
Las comunicaciones interventriculares medianas o de gran tamaño pueden causar síntomas notorios. Es posible que los bebés respiren más deprisa de lo normal y se cansen mientras intentan alimentarse. Tal vez comiencen a sudar o llorar mientras se alimentan y aumenten de peso lentamente.
Estos signos suelen indicar que la comunicación interventricular no se cerrará por sí sola y es posible que el niño necesite una cirugía de corazón. En general, esto se hace en los primeros tres meses de vida para prevenir otros problemas. Un cardiólogo puede recetar medicamentos para reducir los síntomas antes de la operación.
¿Qué problemas pueden surgir?
Los bebés con una comunicación interventricular de gran tamaño pueden desarrollar una insuficiencia cardíaca y tener problemas de alimentación que no les permitan aumentar bien de peso. También pueden tener infecciones frecuentes de pecho. Los niños con comunicación interventricular de pequeño tamaño están en riesgo de desarrollar endocarditis, una infección de revestimiento interno del corazón causada por bacterias presentes en el torrente sanguíneo. Siempre llevamos bacterias en la boca, y pequeñas cantidades de estas bacterias entran en el torrente sanguíneo cuando masticamos y cuando nos lavamos los dientes.
La mejor manera de proteger al corazón de una endocarditis es tener una buena higiene dental para reducir las bacterias en la boca. Los niños deben cepillarse los dientes y usar hilo dental todos los días, además de visitar regularmente al dentista. En general, los pacientes con comunicación interventricular no complejas no necesitan tomar antibióticos antes de las visitas al dentista, salvo durante los seis meses posteriores a una cirugía de comunicación interventricular.
¿Cómo se diagnostican las comunicaciones interventriculares?
Los médicos suelen detectar las comunicaciones interventriculares durante las primeras semanas de vida de los bebés, durante un examen de rutina. Escucharán un soplo cardíaco, que tiene ciertas características que les permiten saber que no se debe a otra cosa.
Si su hijo tiene un soplo cardíaco, es posible que su médico les indique ver a un cardiólogo pediátrico (un médico especializado en diagnosticar y tratar las afecciones del corazón en los niños).
El cardiólogo le hará una exploración física a su hijo y elaborará sus antecedentes médicos. Si el médico considera que se trata de una comunicación interventricular, es posible que le pida algunas pruebas, como las siguientes:
- una radiografía del tórax (o pecho): una imagen del corazón y de los órganos circundantes
- un electrocardiograma (ECG): un registro de la actividad eléctrica del corazón
- un ecocardiograma: una ecografía del corazón. Con frecuencia, esta es la principal forma de diagnosticar una comunicación interventricular.
- un cateterismo cardíaco: este procedimiento ofrece información sobre las estructuras cardíacas, así como sobre la tensión arterial y sobre las concentraciones de oxígeno en sangre dentro de las cavidades cardíacas. Esta prueba se suele practicar en las comunicación interventricular solo cuando se necesita información que no se puede obtener con otras pruebas. (A veces también se utiliza para cerrar algunos tipos de comunicación interventricular).


